viernes, 16 de diciembre de 2011 in

Cuando la petición es nostalgia

Cuando la petición es nostalgia

“Papa Noel siempre llega en la Navidad a los hogares, aunque sean humildes”


Es Navidad y a La Medusa, nostálgica, le ha dado por acudir a su agenda de apuntes de buenas notas y, sin esperarlo, ha encontrado una serie de encomiendas y recados incumplidos de tiempos pasados. Debe cumplirlos, por tanto, es muy probable que Paca salga de tiendas para comprobar si, aquello que anotó, sigue todavía en los expositores, ya saben es Navidad y, como antes se decía, La Navidad es tiempo para el arte.

Adoptar un perro; comprar una vaca naif y una cafetera nueva para el microondas; la última edición del Diccionario de la Lengua Española y una escalera plegable que se convierta en galán de noche; un equipo, ahora que estamos esquilmando los montes, para hacer el propio papel en casa; botones de fantasía para renovar un chaqueta, y…

La última tontería: un mechero con lupa; una cometa china; un reloj con sentido del humor; una corbata clásica pero con ositos; la obra de un artesano; un álbum de fotos perfumado; el último libro sobre bicicletas; un fin de semana en Soria con nieve para no poder salir de la casa rural; herramientas para encuadernar todo lo que tengo guardado y un bono para un gimnasio: Un aparato, muy necesario en los días que vienen, para pedir auxilio en situaciones de emergencia; una casa, las jaulas están de modé,  para pájaros; una camiseta para solidarizarse con los del medio ambiente y un tentetieso de los de toda la vida.

 Una suscripción al National Geographic para matar el tiempo junto a la chimenea; un plumero para limpiar libros; un perfume con ingrediente natural de zarzamora; unas velas de cera de abeja y unas sábanas muy suaves con su correspondiente bolsa. Un marcapasos para el trekking y sus correspondientes guías de rutas; un tratamiento de desintoxicación de un día con preling corporal, hidromasaje, algas y drenaje linfático; un conjunto de ollas para poder cocinar al vapor; un telescopio para observar el apasionante mundo de las estrellas y de paso ingresar el en clan de los locos estrellados; una botella magnum de vino francés, a poder ser una de litro y medio y de Château Mouton-Rothschild del 87; un quinqué de cristal finlandés, aunque sea tópico; un cuadro naif que simule ser una granja e incluya cerdos, ovejas, conejos y gatos, lo colgaré en la mejor pared de mi casa, será el mejor recuerdo de Pluto y ...Un ábaco a la antigua usanza para poder hacer operaciones matemáticas a gran velocidad.

Ya lo dijo Shakespeare: “un sueño tranquilo es lo que vuelve a tejer ese enmarañado tejido que ha deshilachado la angustia”. Recordar todas esas necesidades e incumplidos ha sido reparador para La Medusa Paca. A que sí.


Fotos y Texto de La Medusa Paca. Copyright ©

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