REVIVAL de un Hércules CF - FC Cartagena
A la Medusa Paca le gusta el recuerdo, y como ella si tiene memoria, hoy les acarrea lo que hace dos temporadas escribió y fue publicado, tal cual, en SPORTCARTAGENA. Ahí queda para el recuerdo.
DESDE UN HERMOSO PUEBLO NEVADO DE LA RIOJA
DESDE UN HERMOSO PUEBLO NEVADO DE LA RIOJA
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Dos estalactitas de hielo
PEDRO ROBERTO J.P. En Villamediana de Iregua (La Rioja) 11/01/2010
Última actualización 12/01/2010@23:19:40 GMT+1
Un gran amigo de este casa además de colaborador, Pedro Roberto, nos envía una colaboración preciosa sobre cómo vivió él, cartagenero de adopción, el Hércules-Cartagena por la tele y con la compañía, como siempre hace gala, de SPORTCARTAGENA. Nos remite unas fotos y una imagen suya, para que lo vayamos conociendo. Es la primera pero, seguro, no será la última. Aquí lo tenéis.
Pedro Roberto J. P. desde su domicilio riojano y con el portátil preparado para seguirnos |
Presencié, ayer, el partido desde este “Rincón para doce”, con un frío de nevazo y cuchillada, un paisaje de escarcha y plomo, con aristas de vientos esquineros y traidores, y con cellisca ventisquera de copos tiritones que me recordaba ese frío de pobres y rescataba la evocación de una época de sabañones fogones y braseros.
Por eso se me hizo antipática esta punzada de las dos estalactitas de hielo que nos clavaron los dos estiletes del buen equipo Herculino, venidos del Este y acostumbrados en esos países gélidos a estos avatares.
Al comienzo, y durante casi todo el primer tiempo, el frío apenas fue un incidente menor, un contratiempo intrascendente ya que estaba perfectamente pertrechado frente al hogar con esos troncos de encina ardiendo y que alegraban, con candela, esa esperanza de no saltar del tercer puesto de la clasificación.
Total, que pasaba el tiempo, se hacían, casi las dos, y aquello no se aclaraba.
En ese momento comenzó a tornarse literario lo que hasta entonces hubiera pasado por simplemente periodístico. Llevaba dos horas largas sentado y seguía allí atrapado por el sentimiento, ya en el cuarto puesto de la clasificación, sin saber por cuánto tiempo, aunque supongo y deseo que no por mucho, porque, hombre, a estas alturas de competición ya se vislumbra que los lóbregos cierzos castellanos darán paso a los cálidos vientos del sureste y, si puede ser Leveche, mejor.
Estoy congelado, en el ánimo, pero, la primavera está despertando.
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