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miércoles, 29 de enero de 2014 in

El habla de Grávalos -.G.-




El habla de Grávalos -.G.-


Andar y Pensar

A; B; C; D; E; F;
- .G.-

Gacha: Alimento a base de harina y agua, generalmente migas.

Gaita: Órgano reproductor masculino.

Galafate: Persona pilla, truhán, que tiene aviesas intenciones.

Galápago: Niño listo y espabilado, también astuto y travieso.

Galbana: Cansancio, desgana para hacer las cosas, persona perezosa.

Galera: Carro muy largo, con ruedas de madera. Dos grandes traseras y dos pequeñas delanteras.

Galgajo: Escupitajo.

Gallarín: Persona con los testículos situados en posición superior a lo normal.

Gamella: Utensilio de madera donde se pica y adoba la matanza.

Gamellon: Recipiente donde se da de comer a los cerdos.

Gambre: Grama, planta parásita muy abundante en las viñas y muy perjudicial debido a la gran facilidad con que arroja raíces que roban la humedad a las cepas.

Gamusino: Animal imaginario.

Gancho: aparejo, generalmente de madera, utilizado a lomo de las caballerías para transportar el yugo, arado, leña  ropa del agricultor.

Gañán: Niño que acompaña al labrador con la yunta.

Gañote: Garganta del ser humano, también del ganado.

Garapitero: Corredor, encargado de las pesas y medidas del municipio. Comisionado acompañante de compradores de vino, aceite y cereales.

Garapito: Propina en especie de lo que se vendía que se solía dar al garapitero, solía ser una botella o garrafita de aceite o vino.

García: Zorro, raposo.

Gargajo: Escupitajo.

Garganchón: Tráquea. Lo más profundo de la garganta.
Gardacho: Lagarto.

Gardama: Insecto que se mete entre las cortezas de la cepa.

Garlopa: Instrumento similar al del carpintero utilizado para cortar el pan para hacer migas.

Garranchada: Desgarrón, hendidura producida por un corte.

Garra: Pierna.

Garrampazo: Calambre producido por un contacto en la luz.

Garroso: Persona de piernas curvas y que al andar roza una pierna con la otra..

Garrotillo: Palo corvo que utilizaban los segadores para dar el nudo al vencejo sin lastimarse al atar los haces de mies y hacer gavillas.

Garruñada: Arañazo.

Garruñar: Arañar, rasguñar.

Gatera: Agujero hecho en la parte inferior de la puerta para que entre y salga el gato.

Gatillo: Bocado de las caballerías, parte del freno que entra en la boca del caballo o mulo.

Gavilla: Haz de trigo.

Gavillar: Formar gavillas.

Gayata: Cayada o cayado.

Gayuba: Planta ericácea. Futo rojo y pequeño del espino.

Gazapo: Conejo joven.

Gazuza: Hambre.

Golorito: Jilguero.

Golpe: Puñado de mies.

Gordilla: Intestino de las reses, generalmente corderos y cabritos lechales que se cocinan asadas o en salsa.

Gotinear: Lloviznar.

Grada: Instrumento metálico que lleva varios ganchos, y que tirado por caballerías sirve para envolver las semillas.

Grado: Contenido de alcohol que tiene el vino.

Granza: Terrón pequeño. Residuo de paja, espiga, grano sin descascarillar, que quedan de las semillas cuando se aventan o criban.

Granzón: La espiga misma o trozo de espiga que no se ha desprendido.

Gravera: Guijarral, cascajar. Depósito de canto rodado. 

Grijo: Pequeña piedra recogida en los cauces de las yasas o barrancos utilizadas para obras.

Gua: Agujero hecho en la tierra para el juego de las canicas.

Guarros: Piedras cilíndricas para jugar a la calva.

Güesque: Interjección usada para que las caballerías vayan a la izquierda.

Guincho: Gancho terminado en punta.

Guindilla: Persona de genio vivo y violento.

Guino: Animal macho o mulo coceador.

Guripa: Persona pilla o  maliciosa.

Gurriato: Gorrión pequeño.

Guito: Mulo o asno coceador.

Gusapo: Gusarapo




PD. Está claro que éste es un diccionario abierto y, por lo tanto, receptivo a cualquier aportación. 
Me cuenta mi hermano Jesús Mª, no tendré más remedio que dedicarle la entrada, así lo hago, que en su lectura somera, se ha dado cuenta de la no aparición, tiene razón,  en esta letra G de palabras como: 
Gandul y mira que los hay y se impropera con ella, allí en el bar.

Gandul: Aun no siendo un vocablo propia del habla gravaleña sí se utiliza mucho al referirse a  ese individuo tunante, holgazán y  vago: “¡Levántate, gandul, que ya son las doce!”.

Gavilla: Que específicamente no se utiliza tanto para referirnos al haz de mies, que se utiliza el vocablo de “fajete”, y sí para referirnos al conjunto de manadas  formadas  por los sarmientos. 

Garranchada: Utilizado igualmente para referirnos a un labrado muy superficial de la tierra.

Por lo tanto, así las añado.

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domingo, 26 de enero de 2014 in

Recorrido







Recorrido
 "En una decadencia de hermosura, la vida se desnuda". (Juan Ramón Jiménez)

En el principio fui espectador del mundo que se reducía a mi calle, el centro del Universo. Habría otros mundos pero ninguno era como el mío. Aunque lo recuerdo, no me acuerdo cuando tuve el primer reloj, no me hace falta, el tiempo siempre fue una sensación y hoy más. No hay reloj en el mundo capaz de medir el tiempo de mi infancia. Se levantaba el telón, se disipaba  esa neblina blanquecina con olor a sol, era la hora de bajar al paseo, ese paseo de tierra y polvo en el que los tiovivos levantaban las persianas. No sabía si el destino estaba barajando las cartas, o, quizá, ya estaba escrito, eso me tenía sin cuidado, mis preocupaciones no llegaban más allá de la noche. Las golondrinas, hermosas aves de coloración azul metálica, siempre me trajeron la primavera que precedía a ese larguísimo verano entre espigas y que el final del mismo llegaba con la recogida de aquellos frutos otoñales y con las temblorosas mareas septembrinas invadiendo el arenal. Y todo, el aire también, se llenaba de olor a salitre cuando comenzaban a fluir gentes, decían eran portugueses, a recoger la uva. Siempre supe de la llegada del otoño, porque con él, venían los estorninos. Y todo cuando, “en una decadencia de hermosura la vida se desnuda”, el canto de la lluvia y el gemir del viento siempre me despertaban en aquellas frías y oscuras mañanas de internado. Siempre fui medio feliz con la llegada del invierno y pensando que cuanto menos tiempo queda, y no sé porque, más deprisa pasa. Vale.

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